miércoles, 15 de mayo de 2013

Cadena perpetua para un perro.

Paseando por Navarra entramos en la realidad de tantos pueblos que tienen a los perros atados en cadenas. Cada casa, un perro atado. Un perro condenado. Algunos los sueltan una vez al mes a que corran, otros una al año y otros, como este,  desde los cuatro meses de vida condenado a llevar una vida de dos metros de cadena donde no existen las caricias, donde la comida aparece cuando se acuerdan y donde el agua cae de tanto en cuanto... Tiene ya unos nueve o diez años de vida. ¿Vida? ¿Esto es vida? Esto es un martirio. Repleto de heridas de cemento y lleno de excrementos a su alrededor, sin contar su media cola gangrenada en tiempos que fue curada simplemente con el paso del tiempo y con su sufrimiento. No se puede consentir dejarlos así. No puede ser que un ser o seres llamados humanos y vecinos de un pueblo sean capaces de convivir a su alrededor viendo esto. Nadie vive en esa casa ya. Alguien, quien sea, suele acordarse a echarle agua alguna vez. Cuando llueve tendra su día de suerte por que el cazo estará lleno. Ayer fue su día. Bebió alrededor de unos dos litros de agua. Y comió, por que no pudimos consentir en el estado que lo tenían. Comió jamón, algo que en su vida habrá probado. Y también hubo tiempo para comer pienso. Aprovechamos para ver sus heridas desde la lejanía más cercana. Observamos su cola partida, sus heridas de dormir diez años en el suelo, frío, húmedo o caliente. Observamos su cuello y collar, el que desde que es adulto no se lo han cambiado jamás. Observamos su pelo, sus ojos de ruego pero a la par de desconfianza. Y observamos una nueva herida que comenzaba a sangrar. También nos dio tiempo a ver que esta desgracia venía acompañada de otro hermano en la parte trasera de la casa. Donde se podía ver la misma estampa desoladora. Misma cadena, misma condena. Nos fuimos con mucha tristeza pero prometimos que no quedaría esto así y que desde luego, no quedarás olvidado por nosotras. Presente y esperando poder buscar soluciones acertadas para tu futuro. Esto no se puede permitir. Cadena perpetua para este perro, ejemplo de tantos repartidos por muchos pueblos. Asco de raza la que dice llamarse humana...